sábado, mayo 05, 2007

El inspector de pelos



El inspector de pelos avanzaba por la habitacion, siguiendo el rastro de los pelos rojos que quedaron en la escena del crimen. No habia otra huella solo pelos rojos que brillaban como escamas en los ojos.


La mujer desnuda, parecia dormida, pero todo hacia indicar que habia sido narcotizada. El viento corria como un loco calvo por toda la habitacion. Las ventanas estaban abiertas. Los pelos rojos se elevaron del piso y volaron por los aires. El inspector de pelos, siguio su rastro por la ciudad. Los pelos hechos peluzas vagabundas iban tambaleandose por las baldosas, enredandose en las hojas de los arboles, o mezclandose en las siluetas de la ciudad.


El inspector vio a lo lejos como los pelos se anudaban y se desanudaban y se dirigian hacia una quinta invadida por vagabundos que cocian el humo de sus labios a las paredes. Avanzo, temblando, con la lupa en la mano, la pipa encendida por el vaho de la noche y las neuronas en los bolsillos del pantalon. Los pelos llegaban hasta una alfombra roja. Detras se veia una mujer desnuda durmiendo adentro de una pecera transparente. Sus ojos no tenian color. Sus labios eran de un calor irresistible. En sus pies, el inspector de pelos pudo ver, mil pelucas rojas, flotando encima de sus muslos como un mar infinito de corales rojos, a punto de estallar.


2 comentarios:

yasnajazz dijo...

... que historia mas peluda...

jirafazul dijo...

queria quedarme sin pelos en la lengua!